Nuestra viña recibe su nombre del Cacique Picunche Andetelmo, “El Principal”, señor de las tierras que hoy albergan nuestro terroir, al pie de la Cordillera de los Andes, en el Valle de Alto Maipo. Su carácter visionario y pacifico le hizo ganar el respeto de los conquistadores españoles dando origen a una historia de apertura e intercambio que perdura hasta nuestros tiempos. Hoy, el espíritu de Andetelmo sigue vivo en nuestros vinos que expresan toda la nobleza y calidad de un terroir único.

Viña El Principal fue fundada en 1992 por los socios Jorge Fontaine, dueño de la Hacienda El Principal, y Jean Paul Valette, enólgo francés y antiguo dueño de el famoso Premier Grand Cru Classé Château Pavie en Saint-Émilion.

Su objetivo era producir una línea de vinos de la más alta calidad que lograra reflejar tanto el espíritu y tipicidad del terroir chileno como la tradición y experiencia de la familia Valette en la elaboración de vinos finos. El terroir de El Principal, ubicado a los pies de la Cordillera de los Andes, en el Valle de Alto Maipo (D.O Maipo Andes) era el lugar perfecto para su proyecto; su particular combinación de clima, suelos y altura permitía producir vinos con carácter, sentido de origen y extraordinaria calidad.

Los socios seleccionaron 54 hectáreas de la propiedad para plantar las variedades Cabernet Sauvignon y Carmenere. Diez años después, la primera vendimia de El Principal (1999), el ensamblaje ícono de la viña, fue exitosamente lanzado al mercado siendo reconocido internacionalmente como uno de los vinos Ultra Premium chilenos y confirmando el potencial de Chile como denominación de origen de vinos de lujo.

Hoy, dos importantes familias están al mando de Viña El Principal. El empresario y naviero alemán Jochen Döhle compró la totalidad de viña en el año 2005 asociándose luego con la reconocida familia chilena Said Handal, la cual adquirió el 50 por ciento de su propiedad el año 2013. La visión de Jochen Döhle ha sido fundamental para mantener la calidad de los vinos El Principal. Su estrategia ha implicado ampliar las hectáreas plantadas, buscar nuevas variedades e invertir constantemente en equipamiento y tecnología. Ambas familias han supervisado la ejecución esta estrategia manteniendo al mismo tiempo la tradición e identidad de sus vinos.